Basado en hechos reales: La cagué
viernes, febrero 17, 2017
La cagué. Me siento en el filo de mi cama y miro fijamente el cuadro que preside la habitación. Lo miro con la mente en cualquier lugar menos allí, me siento idiota y solo pienso en cómo darle a pause y rebobinar hacia atrás. Las lágrimas empiezan un desfile hasta mis manos, que sostienen mis muslos. En ese momento suena el teléfono.
- Buenos días, ¿qué tal ha ido?
- La cagué
- ¿Cómo que la cagaste? ¿no se lo dijiste? ¿no le has dicho nada?
- No, tan solo la cagué ¿no se puede volver atrás?
- Cariño, la vida es en directo. Solo vale, el aquí y el ahora. Descansa.
La vida es en directo. Hacía tiempo que una frase no me hacía pensar tanto. Estas semanas he querido darle a pause y he querido rebobinar hacia atrás, demasiadas veces. Las cosas sucedían una tras otra y estaban totalmente fuera de mi control. Y yo la cagué tantas veces. La vida no se puede planear, las cosas suceden sin esperarlas o cuando suceden nosotros actuamos cómo no esperamos o como sí esperamos, y da igual en la a o en la b, porque puedes cagarla y ya no habrá manera de volver atrás. Esto es como la lotería, compras un número y lo juegas y cuando ya lo has jugado no hay manera de cambiarlo para comprar el boleto ganador. Y yo la cagué tantas veces.
La cagué. La cagué todas las veces que no fui capaz de decir lo que de verdad siento. La cagué todas las veces que no aproveché el momento. La cagué todas las veces que me sentí mal por sentir. La cagué todas las veces que no fui clara. La cagué todas las veces que no exprimí al máximo a las personas. La cagué todas las veces que fui cobarde. La cagué todas las veces que le de importancia a cosas estúpidas. La cagué todas las veces que dejé que otras personas decidieran mi estado de ánimo. La cagué todas las veces que no sonreí. La cagué todas las veces que no di gracias por todo lo que tengo. La cagué todas las veces que me avergoncé porque algo me apeteciera. La cagué todas las veces que traté mal a alguien. La cagué todas las veces que no escuché a alguien. La cagué todas las veces que no viví al 100%. La cagué todas las veces que no fui yo misma para intentar encajar. La cagué todas las veces que no ayudé a quien me necesitaba. La cagué todas las veces que perdí a personas y pensé ¿y sí? (tarde). La cagué todas las veces que no dije un te quiero a tiempo. La cagué todas las veces que miré solo mi ombligo. La cagué todas las veces que no pensé en los demás. La cagué todas las veces que viví con los ojos cerrados. La cagué, muchas veces. Pero sobre todo, una:
La cagué todas las veces que no me di cuenta de lo que de verdad importa.
Lo que de verdad importa es que respiramos. Tenemos la jodida suerte de respirar. Pero alguna vez has pensado que con eso ¿ya lo tienes todo?
Respira
Ya lo tienes todo
Ahora solo tienes que vivir
Y poner el corazón, en lo que de verdad importa
#LoQueDeVerdadImporta
La película está dedicada a Paul Newman y a sus campamentos especiales para niños con enfermedades graves "Serious Fun Children’s Network” por lo que Aladina asignará lo recaudado a esta causa: la de llevar el espíritu, la fuerza y las risas de estos increíbles campamentos a tantos niños como sea posible.
Así que yendo al cine estáis conribuyendo a hacer feliz a un niño. Para enterarte de los cines que participan, haz clic aquí
Sígueme
No puedes perderte:
Basado en hechos reales: Me gustan los mayores
Basado en hechos reales: Estoy embarazada
Basado en hechos reales: Quiérete, quiéreme
Basado en hechos reales: No sabemos pedir perdón
Basado en hechos reales: Adiós
Basado en hechos reales: Cuando conocí a Grey
Basado en hechos reales: Que le jodan a lo correcto
2 comentarios
Corazón la vida no tiene momento pause para pensar. Y al tomar decisiones pues la cagamos... o no...pero en ese momento hacemos lo que mejor creemos aunque la caguemos luego
ResponderEliminarAl cine iremos a verla seguro, me encantó Maktub y esta va por el mismo camino.
ResponderEliminarUn beso.